dimarts, 1 de setembre del 2009

Jordi Sevilla (Exministre de PSOE)

Jordi Sevilla , exministre del PSOE i apartir d'avui exdiputat del PSOE.

Sense comentaris :

Punto y aparte Martes, 1 de Septiembre de 2009

Hoy presento mi renuncia al escaño parlamentario. Después de veinticinco años trabajando en la función pública y en la actividad política, inicio una nueva etapa vital y profesional en el sector privado. Se trata de una opción estrictamente personal, largamente meditada y madurada. Tras casi diez años representando a la soberanía popular, abandono el acta de diputado, con la que he tenido el privilegio de ser Portavoz de Economía en la oposición, Ministro del Gobierno de España y, ahora, Presidente de Comisión, manifestando mi agradecimiento a todos los que me han permitido desarrollar estas tareas.
Quiero dar las gracias también a aquellos de los que he aprendido tanto a lo largo de estos años. A los votantes y ciudadanos de Castellón, a los militantes del PSOE de toda España y, de manera especial, a mis amigos de Castellón. Pero, también, a los diputados nacionales de todos los grupos parlamentarios que, tomando un café, fuera de la disciplina de partido, son un fiel reflejo de esa pluralidad, esfuerzo, trabajo e inteligencia de los ciudadanos de nuestro país, cuyo sentido común y capacidad de consenso suele ir mucho más allá de los estrechos márgenes de las estrategias electorales.
Dejo el escaño, sin renunciar a ninguna de mis convicciones, ilusiones y compromisos y más convencido que nunca de que la POLITICA DEMOCRÁTICA con mayúscula, a través de la acción colectiva, puede y debe ensanchar y mejorar la frontera de posibilidades de nuestras vidas individuales, con especial incidencia en aquellos menos favorecidos. En ello, y sólo en ello, la política como actividad se justifica plenamente y obtiene su legitimidad.Creo más en el proyecto social que en el poder, en las reglas conocidas que en la discrecionalidad, en los equipos que en las individualidades. Me interesa el “estar, para hacer” antes que el “estar, para ser”. Así ha sido desde que a los quince años empecé a militar contra la dictadura franquista en la clandestinidad y no veo probable que, en esto, vaya a cambiar. En palabras de Springsteen, “I’m working in a dream, though sometimes it feels so far away”.
Pero la acción positiva de la política, en democracia, no se agota en la actuación desde el Gobierno, o el Parlamento. Lo se bien. También la sociedad civil está aportando mucho en este siglo de la cooperación, el voluntariado, la participación plural, las redes privadas y, todavía tendría que hacerlo con mayor repercusión en el futuro. Por eso quiero hacer compatible el paso que hoy doy con mi deseo de seguir estando presente en la vida pública a través de artículos, fundaciones, conferencias, clases, estudios y debates. Y, por supuesto, desde este blog, al que tan agradecido me siento.
Siempre he pensado que hacerse mayor era ir aceptando que ya no “todo” es posible. Que con el paso del tiempo se van cerrando unos caminos y emprendemos otros con fuertes inercias hacia la irreversibilidad. Las “Vidas Paralelas” verdaderamente interesantes no son tanto las que escribió Plutarco comparando personajes griegos y romanos, sino aquellas otras que analizaran lo que hubiéramos podido vivir nosotros mismos si, en lugar de pasarnos aquello en aquel momento, nos hubiera pasado aquello otro igualmente posible. Repasando mi biografía desde esa óptica borgiana, me siento razonablemente satisfecho con “cómo me ha llevado la vida”, en expresión centroamericana.
Pero creo que todavía me es posible hacer algo nuevo, distinto de lo que he hecho hasta ahora. Tengo la oportunidad y quiero intentarlo. Con ello, empiezo otro capítulo en el mismo libro de mi vida, pero sin arrancar hojas anteriores, ni renunciar o repudiar ninguna de ellas. Se trata de un punto y aparte. Y estoy seguro de que la mayoría de intereses, cosas y personas que hasta ahora han sido importantes para mi, seguirán teniendo un destacado papel en lo que me queda por escribir. Total, aunque parezca que, como Alicia, voy al otro lado del espejo, en realidad, solo voy ahí cerca, al otro lado de esta misma calle común que nos lleva a todos. Y ya sabéis, sigo trabajando en el mismo sueño.